La celebración del Día de las Madres se ha convertido en un verdadero dolor de cabeza para las autoridades.

Tradicionalmente la celebración se hace de tres maneras: grupos familiares que acuden a los restaurantes, otros que solicitan la comida a domicilio y los sancochos o arroz con pollo en las viviendas.

Lo que llama la atención es la tendencia que en los últimos años registra el festejo: aumento de las riñas intrafamiliares, lesiones personales y hasta homicidios.

Un análisis preliminar lleva a la conclusión de que la combinación de alimentos (regularmente arroz con pollo) y el excesivo consumo de licor, son generadores de riñas, especialmente intrafamiliares.

Lo que se ha podido establecer es que las riñas intrafamiliares tienen su origen en viejos resentimientos que salen a relucir en medio de discusiones que terminan en altercados.

Estas situaciones han repercutido en el comportamiento de ciertos delitos. El año pasado, por ejemplo, se registraron 3 homicidios. El primero, en el barrio Carrizal, producto de una riña a las 8 de la noche donde la víctima murió con heridas de arma blanca.

Los dos restantes se presentaron en el barrio 1o de Mayo, con arma de fuego, también desarrollo de una riña a las 9 de la noche.

En ambos casos la tendencia de los hechos fue en horas de la noche, con bastante avance de la celebración.

Ese mismo día fueron reportados 11 casos de violencia intrafamiliar, 11 personas lesionadas, 10 hurtos a personas, 6 a residencias, 5 a establecimientos comerciales, 1 automotor, 2 motocicletas, un caso de delito sexual, 3 accidentes de tránsito con 3 lesionados y 6 hurtos de celulares.

Teniendo en cuenta toda esta situación, las autoridades se encuentran en máxima alerta, con el fin de prevenir hechos de violencia que desemboquen en riñas, lesiones personales y homicidios.

Es así como la Alcaldía Distrital prepara un Decreto para regular el funcionamiento de los establecimientos públicos, por localidades, restringiendo el horario de 4 de la tarde a 2 de la madrugada.

Estas restricciones estarían dirigidas, básicamente, hacia las localidades Suroccidente, Suroriente y Metropolitana, que registran las estadísticas más críticas para esta fecha. Con la medida se respetarían los corredores de rumba como el de la carrera 8 y de las restricciones quedaría excluido el norte de la ciudad.